Encontrar el ritmo en una relación es el mayor desafío para una pareja. Es fácil enamorarse, una vez que has encontrado a alguien (¡antes de la relación, descubrir que alguien es de hecho la parte más difícil!). Es fácil decir: "Te amo", una vez que has compartido algunos momentos especiales con un novio o novia.
Pero, ¿qué pasa con esa consistencia que todos anhelamos, que solo proviene del verdadero compromiso? Eso es mucho más difícil. Pero absolutamente posible. El compromiso comienza con el deseo. Cada persona tiene que quererlo y estar dispuesto a sacrificarse por el otro. Se necesita cambiar la forma en que nos vemos a nosotros mismos y renunciar a algo, para poder dar a alguien más. La cosa es que no es tan difícil como podrías pensar.
Nosotros, los jóvenes de la generación del milenio, nos comprometemos con cosas un poco menos que nuestros padres y las generaciones mayores. Comprar una casa, establecerse, encontrar a esa persona especial. No queremos sentir apresurado. Para respaldar esto, hay algunas investigaciones sorprendentes de The Pew Research Center que confirman esto:
"El Pew Research Center informa que los millennials son significativamente menos propensos a estar casados que las generaciones anteriores en sus 20 años. Y una encuesta reciente de Gallup descubrió que el porcentaje de personas entre 18 y 29 años que dicen ser solteras y que no viven con una pareja aumentó del 52 por ciento en 2004 al 64 por ciento en 2014. El matrimonio entre las personas de 30 y también disminuyó 10 puntos porcentuales durante esa década, mientras que el porcentaje de convivencia aumentó del 7 al 13 por ciento ".
Ah, compromiso. Soy un vivo ejemplo de este estudio. Gran parte de mis 20 años se definió por la falta de compromiso con un compañero. Tropecé en diferentes relaciones, mientras que todo el tiempo, la relación que más me hacía falta era la que tenía conmigo. Tienes que estar bien contigo mismo antes de poder esperar sinceramente comprometerse con alguien más
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